Esa claridad afilada
avanza,
como un rastro
presumiblemente afecto a mi atención,
potencial y clave
en el desarme de la rigidez,
ganando la empatía entre tú y yo…
avanza,
como un rastro
presumiblemente afecto a mi atención,
potencial y clave
en el desarme de la rigidez,
ganando la empatía entre tú y yo…
Retorna a mi cabeza el balance,
al inducir, innegociable,
la más perfecta imperfección
que mueves en mi interior,
día a día…
Me poso en tu plano
y el dibujo vivo palpa
la geometría de la piel,
modelándose a tu modo…
Las señales te señalan
y lates en mi frente,
propagándose, enormemente,
el sentimiento
y en tus ojos
se pierde mi extensión,
mientras la impavidez escasea…
La revoltura de mi lengua
embriaga la medianoche
y, el reflejo que sueña
la intensidad del ensamble,
nos recompone…
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