Raíz

Impetuosa,
sin reserva,
como una luz cimbreante que brota
en los espacios interiores
me riegas con la savia del impulso arbóreo…

Creces conmigo,
sorbo a sorbo,
bajo el deseo cómplice e irresistible
de hacer prevalecer lo infinito…

Riza mi tierra tu figura y brío,
mientras le haces acreedora
de sus mapas sensoriales…

Me alzas junto al movimiento asiduo
que envuelve sus aristas alrededor de mi aire
para abrir el silencio,
donde te revelas como secreto único e irrefutable…