lunes, 28 de mayo de 2012

Al Compás de lo Eterno


Como huella abismal
me derramo
en tu refulgente espesura
-sacrificio de mi lengua-

Me hago a tu sol
saliva de tu espuma,
que engendra fuego
en su interior…

Soy de tu voz…
Miel pura…

Envoltorio de cristal,
temblor de un secreto confeso,
manando de tus labios
su panal…

Me escondes
y emerjo dueña de tu boca...

Suspiro infinito de un silencio
que embriaga tu respiro…

Me abro a tu luz
y sujetan su calor
las golondrinas de mi pecho…

Latimos al compás de lo eterno…

Nos amamos
en el esqueleto del tiempo
hasta hacerlo fósil cremado
por nuestros cuerpos…

Arena sumergida en gritos luminosos
-sangre de estrellas-

Velero glorioso naufragando
nuestra noche perfecta…

No hay comentarios:

Publicar un comentario