jueves, 1 de octubre de 2020

Polvo y Acero

Me reparto entre tus dedos,
fosforesciendo;
siendo núcleo palpitante
que extiende su intensidad de albor y renuevo
por cada arista del alma…

Conozco tu crisol y fragua;
la pasión que desenreda
la piel interina del silencio
con el que nombras lo exacto…

Llevo trenzada tu polaridad a mis raíces;
soy fuego que resiste sobre tu altar flotante;
acaso un presagio de inmortalidad
que convierte en polvo de diamantes
la espada indulgente,
cuyo poder transciende,
como el sol,
atravesando sien y palabra;
espíritu y carne
para siempre…

No hay comentarios:

Publicar un comentario