domingo, 5 de junio de 2016

Contacto Indivisible


No hay prisión en la boca de tu noche,
me ato a su condena,
al premio exuberante de la utopía
que enreda la infinita cavilación
de tu nombre…

Mi esencia recrea
en tu cristalino toque
y la quietud luminosa
absorbe mi sombra,
la mirada desata el silencio,
mientras retrato en tus ojos
mi propia silueta,
como un sinfín de notas
que apuntan a tus sueños…

Floto en la luz de tu aire,
esa íntima alusión
que me precisa,
fijándome a tu lengua…

Moldeas incesante mis cenizas
y ardo mientras saboreo de a poco
una ración de estrellas infinita…

No hay comentarios:

Publicar un comentario