Me incorporas a la interacción
que activa la cohesión progresiva,
relatada
por tu cuerpo en mi cuerpo;
en un trance de luces y sonidos;
de compases abiertos
que declamas, sin distancia…
A través de tus vitrales,
las sombras van siendo despojadas,
porque construyes
arquitecturas musicales elevadas,
donde late mi esencia;
pinturas de lírica que congregan
un silencio de armonía
con mis pasos
y que, esculpen,
con audacia,
tu voluntad indisoluble de hacerme sonreír,
mientras constato que tus caricias,
fluyen y se ensanchan en un vals
dentro de mí…
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