Me quito la sombra
en el instante gemelo que nos entrelaza,
y se agitan los doseles del silencio
al ver perdernos
en la sublime ingravidez imperante…
Crujen enloquecidas las formas,
estrellándose en el alma;
el color de la pasión
se enrosca en los relieves salinos
y cosido al humo de los labios,
ronroneante,
brota el símbolo de luz
que consagra la secuencia depuradora
de los cuerpos…
La candidez rutilante oxida
las páginas de la memoria
y sostienen, con fuerza, mi aliento renacido…
Erudito,
el presente, devora
los rumbos transitorios;
me muestra revueltas las horas
y, desmedida,
la lírica geométrica de tus ojos…
TE AMO MI AMOR!!!!
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