Encaramo mi lengua
a la corteza cristalina que te envuelve
y vibro,
mientras sumerjo
en la profundidad latente
que me consigue…
Pierdo,
me delato,
haciéndote crecer por mi saliva,
en la genuina sedación
de tu celeste poemario…
Soy geometría mineral
revelada a tu silencio,
suelo perteneciente a tu arrebol ignoto…
Además
fracción del todo,
carne de tu porfía
y en cierto modo,
profecía,
que aplaca la furia del tiempo
y su edad oscura…
Bajo mi piel descansa
la luz de la luna,
plétora,
batiente…
Me impulso a través de tu esencia,
consciente de permanecer ingrávida
por la solemne transmisión
de tu energía poética…
TE AMO MI AMOR!!!!!
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