la pausa que te vislumbra;
conquistas la preñez del insomnio
y la rima de tu tacto invisible
deja caer la fulgencia de tu figura
en los moldes palpitantes
del silencio…
Me acomodo
en la curvatura de tu alma...
Me leo exaltada
en el azul que me desliza
por la quietud del universo...
Poblada de tu nombre me recitan
los espejos de la noche,
sumergida en su constante...
Emanan tu perfume
los giros que mimetizan
y engarzan la escritura del aire,
moviendo en mi lengua
el brillante testimonio
de amarte...
conquistas la preñez del insomnio
y la rima de tu tacto invisible
deja caer la fulgencia de tu figura
en los moldes palpitantes
del silencio…
Me acomodo
en la curvatura de tu alma...
Me leo exaltada
en el azul que me desliza
por la quietud del universo...
Poblada de tu nombre me recitan
los espejos de la noche,
sumergida en su constante...
Emanan tu perfume
los giros que mimetizan
y engarzan la escritura del aire,
moviendo en mi lengua
el brillante testimonio
de amarte...
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