Límpido Aleteo

Late el asombro,
burbujea sobre mis pestañas
con ímpetu imperturbable,
mientras me rasgas el silencio
y me bebes a sorbos el alma…

Escarbas mis adentros
y precipita
la punción de tu esencia…

Imbuida de tu verbo,
pulso la voz de tu atalaya
que en dulce emanación se escapa
por los bucles de mi lengua…

Me elevan tus escalones azules,
me conducen
hasta los sueños de la luna,
que arde en inefable relieve
en una pausa nuclear,
que trenza en límpido aleteo
mi sensible profundidad…

De Burbujas y Fractales

Me reúnes a tu campo de cristal,
al imperio regencial
de tu lengua,
dejando caer mis sombras
y en puntillas girar
sobre el sedoso palpitar
del silencio…

Tu voz se hace lluvia
en mis páramos secretos…

Sorbes el halo
esencial de mis espejos,
convirtiéndome en pluma
repleta de pureza…

Agudos cortes recrean tu paso
en mi saliva
y manan crepúsculos,
secuencias enteras
de burbujas y fractales
que te citan,
que frasean tu dulcísima presencia…

Te recorren mi hierba,
mis pájaros y ríos,
la astuta contemplación de mis dedos,
dando tregua a la extensión de tu carne,
a la grácil inclinación de tus sentidos…

Me cubres el aire
y el corazón de tu sueño
me pide cada noche
por tu ruedo deslizarme…

En tu Deleite II

Me haces brotar
en el júbilo
de tus lagos astrales…

Henchida de toda luz
y mojada de tu aire…

Deleitarme
al fisgar la noción incorpórea
de tu lengua…

Presenciar la brillantez
del pináculo de los sueños,
reclinada
en la profundidad sonora
del imperio inmarcesible de tu silencio…

Arrancarle la piel a las horas
y en su ausencia testificar
el infinito trance de tu sombra…

Mágico IV

Pertenezco
al rasgo irrenunciable de tu mirada,
a las hojas que le anidan dulcemente
y destilan su entusiasmo en mis palabras…

A su tinta arrolladora que escribe
sobre las telas de mi alma
con el profundo colorido del silencio…

A su tacto de sol
que se enreda a mi frente
y pronuncia en mis labios
la potestad de tu verbo…

Balanceo mi saliva
al compás fundamental de tu lengua
con tal estupor,
que de azul se escapan mis versos
trenzando la luz del corazón…

Claves del Instinto

La dimensión de tu carne
me abarca el silencio,
fluye como el blanco suspiro de la nube
en las zonas azules del viento…

Mis manos se bañan en tu cuerpo,
incorporándose a la esencia misma
de tu naturaleza…

Mi alma libra,
cristalina,
en lo profundo de tu lengua
y sumergida
en las claves del instinto,
exploro el recinto de tu aire,
hallándome reflejada
en la luminosidad excesiva
que proyectas…

Despeñas
en la humedad de mi sonrojo
y el ignoto parpadeo
me asegura permanecer cautiva
del perpetuo manantial de tus ojos…

Tríptico Boreal

La exquisita densidad de tu silencio
hace que llueva en tu boca,
que cuelgue el copioso
resplandor de mi lengua
en las cavernas azules de tu sombra…

Romper el papel de la cordura
y enhebrar mis instantes
con el cristal de tu esencia…

Dibujar en tu piel
la flor de mis esbozos
y descifrar el enigma del tiempo,
inmortalizando este refugio
en las letras de un cancionero devoto…

Permites que sean tus ojos
mi tríptico boreal,
la escena inmortal
que me sujeta a tu aroma…