Resuello de Ausencia

Los momentos de la noche
me suscriben a tu alma
con la frecuencia ofrendada
del silencio…

Detrás del luminoso respiro
de tu sueño,
reposada,
se descubre la invocación de mi sombra…

Con intención poderosa
el bosquejo de mi lengua
aprisiona las páginas del aire
que traen en sus alas
el ruedo sutil de tu figura…

Devora los ángulos astrales
y remite toda seña de tiempo
a través de la frescura
que brota de tu orilla…

Los campos de mi piel acreditan
la cercanía de tu tacto
y vibran en su resuello…

Consigo
el paisaje cardinal de tu verbo,
mientras dormido sigues preservando
nuestro refugio secreto…

Prendada

Inquiere tu luz
los pasillos de mi noche;
revuelca
su andar fulgente en mi saliva
y a la vez suspira mi alma,
confina mi lengua
al elixir de su cautiverio…

El rocío de tu tacto renueva
la solidez de mis sueños…

Y exhibo
en trazo resuelto,
prendada a tus redes de agua,
los tejidos empapados
de tu indómito silencio…

Deleite Cautivo

El sereno de tus ojos
clarea mi sombra;
descubre el melodioso fragmento del alma
que entrelaza los mensajes del silencio,
ciñendo el deleite cautivo…

Me confiere
el nutrido arsenal de acordes
que sella en mi boca
el concierto prodigioso de tu gracia…

Te escucho
y mi ausencia se viste de agua
que rueda los bordes pulidos
de tu fuente…

Tu roce silente
configura en mi lengua
su suelo fecundo
y con auténtica conmoción
dejo escapar entre suspiros
la fragancia perenne de tu corazón…

Conferida

La tierra brota de mi sangre;
del canto colorido de mis yagas
que amparan el tatuaje de tu lengua…

Borbotea
con la pasión de las olas
rompiendo
en el silencio declarado…

Despeja mis dedos
con la suavidad del agua,
que moldea tenaces los suspiros
en los claros del tiempo…

Soy tantos sueños elevados a tu altura,
que cada instante me declara
luna de tu verbo
y portadora de la magia
que te hace cautivo
de todos mis secretos…